LOS CONTRASTES DE DIOS

Amado hermano(a) universal… voy a abrir mi diario a ti. Aquí te comparto mis pensamientos que escribo en un cuaderno de notas que llevo a diario… 

Espero tu tolerancia conmigo… 

DIOS ME CONOCE EN PROFUNDIDAD

«Señor, Tú me examinas y conoces, sabes si me siento o me levanto, Tú conoces de lejos lo que pienso. Ya esté caminando o en la cama me escudriñas, eres testigo de todos mis pasos. Aún no está en mi lengua la palabra cuando ya Tú, Señor, la conoces entera. Me aprietas por detrás y por delante y colocas tu mano sobre mí.

Me supera ese prodigio de saber, son alturas que no puedo alcanzar. ¿A dónde iré lejos de tu espíritu, a dónde huiré lejos de tu rostro?
Si escalo los cielos, Tú allí estás, si me acuesto entre los muertos, allí también estás. Si le pido las alas a la aurora para irme a la otra orilla del mar, también allá tu mano me conduce y me tiene tomado tu derecha.
Si digo entonces: Que me oculten, al menos, las tinieblas y la luz se haga noche sobre mí. Mas para Ti no son oscuras las tinieblas y la noche es luminosa como el día»

Salmos 139

Los contrastes de Dios… el Evangelio y las lecturas de este domingo, de la liturgia católica. 

«Todo llegará a saberse» (Lc 8:16-18), esa afirmación es curiosa, es una amenaza o una promesa, cada uno sabe qué tiene que ocultar. Se conocerán los motivos, las heridas, las acciones, el modo en que amamos, los secretos, las equivocaciones, las decisiones de las que nos arrepentimos, los gestos de servicio, las palabras anónimas, lo que el corazón vertió ¿Qué despierta en mí esa afirmación, de que todo se sabrá?

«Tú me sondeas y me conoces» (Sal 139) Dios me vuelve a interpelar cada vez que vuelvo a Él, cada vez que vuelvo a escuchar a Jesús ¿Cuál es la buena noticia que Jesús me da hoy?
«Nada hay oculto que no sea descubierto»…
Señor, ayúdame, te lo ruego, a volcarme a tí, a no tener secretos con nadie, menos contigo, ayúdame para que mi vida sea transparente, para que los otros conozcan mi debilidad en mi autenticidad, que mi vida brille como una LUZ cuando puedo amar a pesar de mi nimiedad. Ayúdame Jesús!!! Quiero ser lumbre que brille e ilumine todo lo que me rodea!!! ayúdame que no puedo!!!

Amen

Un mar de fueguitos

Un hombre del pueblo de Neguá, en la costa de Colombia,
pudo subir al alto cielo.
Y a la vuelta, contó.

Dijo que había contemplado, desde allá arriba,
la vida humana.
Y dijo que somos un mar de fueguitos.
El mundo es eso –reveló–.
Un montón de gente, un mar de fueguitos.
Cada persona brilla con luz propia entre todas las demás.
No hay dos fuegos iguales.
Hay fuegos grandes y fuegos chicos
y fuegos de todos los colores.
Hay gente de fuego sereno que ni se entera del viento,
y gente de fuego loco que llena el aire de chispas.
Algunos fuegos, fuegos bobos, no alumbran ni queman;
pero otros, otros arden la vida con tantas ganas
que no se puede mirarlos sin parpadear,
y quien se acerca, se enciende.

Eduardo Galeano (El libro de los abrazos)

Fragmento tomado sin permiso del sitio rezandovoy.org 

Anotaciones, 19 de septiembre 2021, Amigo Universal

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