“En el mundo, ustedes habrán de sufrir; pero tengan valor: yo he vencido al mundo”
Juan 16:33
La Resurrección es un lenguaje universal que suscita esperanza, que trae alegría y renovación al corazón, marca un nuevo comienzo. La Resurrección nos alienta, nos motiva, nos invita con un grito que expresa a viva voz ¡Animo sigan adelante!
La Resurrección, tiene implícita la palabra “Ánimo”, una palabra frecuentemente usada por Jesús en los Evangelios. Sin importar las creencias individuales, nos infunde la espera de buenas noticias, hace salir la vida de la tumba recordándonos que la muerte ya no tiene poder sobre nosotros. La Resurrección nos invita a quitar la pesada piedra de la desesperanza, la tristeza y la desolación, nos anima a dejar abierta la entrada a nuestro corazón*
Este es el momento de cobrar Ánimo, de irradiar vida, con esa energía proveniente del alma, entonces comprendemos que la palabra Ánimo y la palabra Alma tiene la misma raíz que significa “respirar”, en griego es anemos=viento o soplo. Ánimo significa “dar vida”.
Jesús trae hoy un mensaje de vuelta a la Vida, de una nueva esperanza para un mundo que siente que la pierde cada día más. Jesús nos irradia carácter, valor, alegría, fuerza vital.
Hoy como ayer, el mensaje del Resucitado nos dice “Tangan Ánimo, levanten la cabeza porque muy pronto serán liberados” (Lucas 21:28)
El Amigo Universal
*Muy Inspirado en el mensaje del Papa Francisco en la Vigilia Pascual
En este caminar es fundamental encontrar palabras de Ánimo, principalmente porque somos frágiles al caminar. Se viene a mi mente la imagen de un bebé que comienza a dar los primeros pasos y como gracias al aliento de sus padres sigue perfeccionando su andar en cada intento. Jesús ese ese hermano mayor que nos motiva a seguir, que sabe que nos caeremos en más de una ocasión pero que también está seguro que si lo volvemos a ver Él nos dirá: ¡Ánimo, sigue adelante!
¡Gracias por darnos Ánimo!